Estamos siendo testigos de un año de grandes cambios en lo que respecta al ámbito laboral. Con las reformas del subsidio que estamos viendo en 2024, hay cambios significativos que podrían impactar negativamente a muchos desempleados.
Aunque hay algunos aspectos positivos, es crucial entender las partes «no tan bonitas» para prepararse adecuadamente.
Cambios en las cuantías del subsidio
Uno de los cambios más notables es el ajuste en las cuantías del subsidio:
- De 0 a 6 meses: La cuantía aumenta de los actuales 480 euros a 570 euros mensuales (95% del IPREM).
- De 6 a 12 meses: La cuantía baja a 540 euros mensuales (90% del IPREM).
- A partir de los 12 meses: Se reduce nuevamente a 480 euros mensuales (80% del IPREM).
Es cierto que este aumento inicial es bueno, pero la reducción progresiva podría afectar de lleno a aquellos que necesitan el subsidio por más tiempo, disminuyendo su ingreso disponible a medida que pasa el tiempo.
Supresión de subsidios específicos
La reforma también eliminará algunos tipos de subsidios específicos, forzando a las personas que los recibían a depender del Ingreso Mínimo Vital. ¿En qué se traduce esto? En desprotección.
Esta medida podría dejar sin la protección adecuada a más de 120,000 personas anualmente que lo necesitan. Además, la transición entre los subsidios actuales y el IMV no está muy clara.
Y, estos periodos de «sombras» pueden traducirse en periodos sin dinero. Siendo que el IMV está dirigido a muchas familias, puede sobredimensionar la gravedad de la situación.
Restricciones en la solicitud
Otro aspecto preocupante es la restricción en los plazos para solicitar el subsidio. Anteriormente, había un periodo de espera de un mes después de agotar la prestación contributiva para poder solicitar el subsidio.
Ahora, aunque se elimina este mes de espera, si no se solicita el subsidio dentro de los seis meses posteriores a la extinción de la prestación, la solicitud será denegada. De ahí la importancia de estar al corriente de las últimas noticias, y más aún, si estás cobrando una prestación así.
Compatibilidad con el empleo
No todo es malo. Es la gran novedad y un aspecto positivo: la posibilidad de compatibilizar el subsidio con un empleo por un periodo de hasta 180 días sin reducción en la cantidad a cobrar. Esto busca incentivar la reincorporación al mercado laboral, permitiendo a los desempleados ganar un sueldo adicional mientras reciben el subsidio.
Sin embargo, esta compatibilidad solo aplica durante los primeros 45 días.
Revisión trimestral de los subsidios
La reforma también introduce la revisión trimestral de los subsidios, en lugar de mensual, como se hacía hasta ahora.
Esto significa que los desempleados no tendrán que estar constantemente preocupados por posibles incumplimientos de los requisitos de renta que les hagan perder el subsidio.
Sin embargo, esta medida también puede implicar que cualquier cambio en la situación económica, personal o familiar tarde más, y con ella, la ayuda.
¿Qué debes hacer si estás en paro?
Ante estos cambios, es crucial que quienes estén en paro se mantengan informados sobre las nuevas normativas y plazos para evitar perder beneficios esenciales. Aquí hay algunas recomendaciones:
- Revisar las comunicaciones oficiales: del Ministerio de Trabajo y la Agencia Estatal de Administración Tributaria y fuentes de información fiable.
- Planifica con antelación: Si estás cerca de agotar tu prestación contributiva, prepárate para solicitar el subsidio lo antes posible para evitar denegaciones por plazos.
- Busca asesoramiento profesional: Considera consultar con expertos en derechos laborales o acudir a oficinas del SEPE para recibir orientación específica sobre tu situación.
La reforma del subsidio por desempleo trae consigo una mezcla de mejoras y algunos desafíos. Estar bien informado y preparado puede marcar la diferencia en cómo estos cambios afectarán tu vida.