El mundo de las carreteras está a punto de dar un importante giro. La Dirección General de Tráfico ha decidido modificar la forma en que se calculan las velocidades que activan los radares de velocidad.
Una decisión más importante de lo que podemos creer, y que puede impactar significativamente a los conductores que suelen apurar el margen de velocidad permitida. Así que, si eres de los que confían en la regla del 5 y del 7, es hora de prestar mucha atención.
Adiós a la regla del 5 y del 7
Durante muchos años, miles de conductores han conocido y, en muchos casos, aprovechado la regla del 5 y del 7 que dictaba que los radares permitían un margen de error antes de disparar una multa. Este margen era de 5 km/h para velocidades inferiores a 100 km/h y de un 7% para velocidades superiores a 100 km/h. Pues bien, esta referencia está a punto de quedar atrás.
Nueva normativa y márgenes de error
A partir de ahora, estos márgenes han sido reducidos. Con la nueva orden, los radares fijos tendrán un margen de error de solo 3 km/h para velocidades inferiores a 100 km/h y un 3% para velocidades superiores a esta cifra. Esto significa que en una carretera con un límite de 90 km/h, el radar se activará a 93 km/h, y en una con un límite de 120 km/h, saltará a 123,6 km/h. Así que, con esta nueva norma, no te fíes de esa regla del 5 y del 7 más (si no quieres pagar multas por ello).
Y no solo para los fijos, para los radares móviles, la situación también ha cambiado. Estos dispositivos, instalados en vehículos y camuflados en diversos puntos estratégicos, tendrán un margen de error de 5 km/h para velocidades inferiores a 100 km/h y un 5% para velocidades superiores.
¿Qué significa la nueva norma de la DGT para los conductores?
Aunque muchos lo piensen, no es recaudar más dinero. Este cambio tiene una intención clara: reducir la siniestralidad en las carreteras españolas. Y es que el exceso de velocidad sigue siendo una de las principales causas de accidentes mortales, y la DGT está tomando medidas drásticas para controlar este comportamiento peligroso.
En 2023, se registraron 211 accidentes mortales en los que la velocidad fue el factor determinante.
La DGT ha respondido a esta estadística alarmante no solo con la recalibración de los márgenes de los radares, sino también con la instalación de 88 nuevos radares de tramo, que calculan la velocidad media de un vehículo en varios kilómetros para evitar que los conductores frenen “de golpe” cuando saben que hay un radar.
¿Qué tecnología se esconde detrás de estos radares?
Los nuevos dispositivos que se están instalando son más precisos y sofisticados. Entre ellos se encuentran los radares veloláser, que son casi invisibles para los conductores y pueden colocarse en lugares estratégicos donde los antiguos radares no llegaban.
Además, la DGT está usando drones y helicópteros, como el famoso Pegasus, para controlar la velocidad desde el aire y captar infracciones de manera mucho más eficaz que antes.
Lo sentimos. La era de la flexibilidad en los márgenes de velocidad ha terminado. La DGT ha dejado claro que la seguridad en las carreteras es su máxima prioridad y que no escatimarán esfuerzos en la implementación de medidas que ayuden a reducir el número de accidentes.
Los conductores deben adaptarse a estas nuevas reglas y ser más conscientes de sus hábitos de conducción. Recuerda que al final del día, estas medidas no solo buscan imponer multas, sino salvar vidas.